El exlíder del Cártel del Golfo y fundador de Los Zetas, Osiel Cárdenas Guillén, fue puesto en libertad luego de más de 20 años en prisión.
El capo nacido en 1967, salió hoy, viernes 30 de agosto, de una prisión en Texas, según registros oficiales de autoridades de los Estados Unidos.
Conocido como “El Matamigos”, Cárdenas Guillén, a sus 43 años, logró un acuerdo con la justicia estadounidense, comprometiéndose a cumplir 14 años de prisión tras declararse culpable de tráfico de drogas, amenazas contra agentes y lavado de dinero. Esta fecha llegó, marcando el penúltimo día de agosto como un momento crucial en su vida.
El acuerdo entre Cárdenas Guillén y las autoridades estadounidenses fue sellado el 30 de julio de 2009. Meses después, el 24 de febrero de 2010, en la corte federal de Brownsville, Texas, escuchó su sentencia, mientras la jueza federal, Hilda G. Tagle, quien le recordaba los crímenes y la violencia que había sembrado en dos naciones.
Durante la audiencia, Cárdenas Guillén se mostró arrepentido, ofreciendo disculpas a México, Estados Unidos, su familia y las víctimas de sus actos. A pesar de sus palabras, la jueza Tagle expresó sus dudas sobre la sinceridad del acuerdo de culpabilidad.
“Me disculpo con mi país, México, con Estados Unidos, mi familia, mi esposa y, especialmente, mis hijos, por los errores que he cometido. Creo que el tiempo que he pasado en prisión, he reflexionado y me he dado cuenta del mal comportamiento que he tenido, y de verdad, estoy arrepentido. También me disculpo con todas las personas que herí directa e indirectamente”, expresó el narcotraficante en esa audiencia.
Con su liberación, se cierra un capítulo oscuro en la historia del crimen organizado en México y Estados Unidos.