Ciudad de México.- La gran tradición mexicana del Día de Muertos ahora también tiene un espacio especial para las mascotas que han fallecido. Este 27 de octubre, miles de hogares en México rendirán homenaje a sus perritos, gatitos y otras mascotas queridas, con ofrendas que no solo incluirán sus fotos, sino también comida, juguetes y recuerdos que simbolizan el cariño y respeto por estos animales que han dejado una huella en sus familias humanas.

En un escenario paradójico, mientras muchos animales sin hogar luchan por sobrevivir en las calles, los animales de compañía que ya fallecieron serán agasajados con croquetas, sobres de alimento, carnazas y hasta platos especiales de guisado, en un tributo que mezcla las costumbres ancestrales con la creciente sensibilidad hacia los animales.

La tradición, que ha ido ganando popularidad en los últimos años, se extiende por toda la Ciudad de México, con altares icónicos como el dedicado a “Ariel”, el perro del director de cine Emilio “El Indio” Fernández, en la Casa del Indio, en Coyoacán. Otro altar destacado es el de la Casa Azul, en honor a los xolos que acompañaron a la pintora Frida Kahlo.

En esta temporada, la demanda de productos relacionados con estas ofrendas ha crecido exponencialmente. Calaveras de perro y gato elaboradas con azúcar, chocolate y otros dulces típicos adornan los altares, junto con figuritas de barro que recrean esqueletos de mascotas. Incluso se han sumado iniciativas digitales, como las “ofrendas virtuales”, donde las familias pueden rendir tributo a sus mascotas desde plataformas en línea.

Si bien el origen exacto de esta tradición es incierto, está profundamente ligado a la cosmogonía prehispánica, en la que los xoloitzcuintles guiaban a las almas hacia el Mictlán, el inframundo azteca. Hoy, el simbolismo se mantiene vivo, y estas queridas mascotas, ahora difuntas, son recibidas con el mismo respeto y cariño que los demás seres queridos en el Día de Muertos.

Esta muestra de amor y devoción hacia los animales refleja cómo la relación entre humanos y mascotas se ha transformado en México, dando lugar a nuevas maneras de celebrar y recordar, no solo a los ancestros, sino también a los compañeros peludos que fueron parte importante de la vida cotidiana.

La fiesta del Día de Muertos en México se reinventa, sumando a las mascotas fallecidas en un tributo conmovedor y colorido.

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