Toluca.- El Tribunal de Tratamiento de Adicciones del Poder Judicial del Estado de México permitió que participantes del Programa de Justicia Terapéutica superaran su dependencia a las drogas y reconstruyeran su vida. Harol y Oziel completaron el proceso judicial y lograron su reinserción social con acompañamiento psicológico, familiar y profesional.
Harol cumplió con su proceso y recuperó su estabilidad
El acompañamiento judicial marcó un cambio en su vida
Harol ingresó al programa del Tribunal de Tratamiento de Adicciones después de su detención, donde aceptó la oportunidad de iniciar un proceso de rehabilitación. Con el apoyo de especialistas, permaneció más de un año en tratamiento, alcanzó seis meses de abstinencia, obtuvo empleo y comenzó a planear su futuro.
Durante la audiencia en el Juzgado de Control del Distrito Judicial de Cuautitlán, la jueza Yanelli Sandoval Hernández declaró el sobreseimiento de su caso al constatar el cumplimiento de los requisitos establecidos. La magistrada explicó que este modelo no busca castigar, sino ofrecer herramientas para superar las adicciones y mejorar la calidad de vida de los participantes.
Familia y acompañamiento institucional
El proceso contó con el respaldo de la familia de Harol y de un equipo interdisciplinario conformado por el Instituto de la Defensoría Pública, la Fiscalía Especializada, el Instituto Mexiquense contra las Adicciones y la Secretaría de Seguridad. La magistrada María Alejandra Almazán Barrera subrayó que la justicia debe acompañar y apoyar a quienes buscan corregir sus errores. Por su parte, el magistrado José Alfredo Cedillo González destacó la cooperación institucional y la valentía de Harol al aceptar el tratamiento.
Oziel se rehabilitó y logró su reinserción social
Jóvenes reciben apoyo en el modelo de justicia terapéutica
En el Juzgado de Control del Distrito Judicial de Tenancingo, Oziel, de 19 años, decidió enfrentar su consumo de sustancias. Inició tratamiento tras escuchar al juez especializado en adicciones, Edgar Garay Vilchis, quien le ofreció la opción de resolver su situación legal y atender su problema de salud.
Durante nueve meses, Oziel participó en sesiones psicológicas y actividades de reinserción social. Al finalizar, recibió su certificado de no antecedentes penales. El juez reconoció su esfuerzo y determinó el cierre de su proceso penal. Actualmente, el joven retomó sus estudios, trabaja y se dedica al cultivo de rosas, actividad que representa su nueva etapa de vida.
El modelo del Tribunal de Tratamiento de Adicciones
Un programa de justicia que promueve la rehabilitación
El Tribunal de Tratamiento de Adicciones del PJEdomex combina atención judicial y apoyo terapéutico para ofrecer una alternativa a las personas con consumo problemático de sustancias. Además, fomenta la reinserción social mediante acompañamiento profesional y fortalecimiento de los vínculos familiares. En consecuencia, el modelo consolida una justicia más humana y efectiva que impulsa segundas oportunidades.
Conclusión
El Tribunal de Tratamiento de Adicciones del Poder Judicial del Estado de México se consolidó como un modelo que transforma vidas. Los casos de Harol y Oziel demostraron que la justicia puede brindar segundas oportunidades cuando se combina con acompañamiento terapéutico y apoyo familiar. En conclusión, el PJEdomex reafirmó su compromiso con la reinserción social y la atención integral a personas con adicciones. Invitamos a los lectores a conocer más sobre los programas de justicia terapéutica y su impacto en la sociedad.
Más información en: Programas de Justicia Terapéutica del PJEdomex
Fuente institucional: Poder Judicial del Estado de México



