Por: Heriberto Nava Altamirano
Qué siga el movimiento del sombrero, qué no cese la lucha y qué no se olvide el pensamiento e ideales de Manzo y otros más que no pactaron con delincuentes y dieron la vida por el pueblo!¡Qué vivan los valientes que lucharon y los que en su memoria continúan luchando por un México justo y seguro desde cualquier trinchera!
Pero, dejando de lado el oportunismo y todo interés mezquino, la lucha debe ser auténtica, sin dividir a los ciudadanos. Se trata de acabar con la corrupción, la delincuencia organizada, el secuestro, la extorsión, la violación, los homicidios dolosos y toda conducta que lacere a nuestra sociedad. Se trata, pues, de que los buenos ciudadanos reciban abrazos y los malos, chingadazos.
Soy preciso en decir que no hablo, ni escribo, desde la superficie de la ignorancia ni del oportunismo. Hablo desde el dolor más profundo que hoy siente la familia de Manzo, el cual conozco perfectamente. Conozco el sentimiento de una familia cuando sufre y llora por la injusticia de perder a un ser querido en circunstancias muy similares a las ocurridas recientemente en Uruapan. Les aseguro que eso no se olvida nunca, y por supuesto que no se debe olvidar.
Debe quedar escrito en la historia para que la conozcan los que estamos y los que vienen, y así evitar que se repita, porque el pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla.
Esta imagen me la envió un amigo; fue tomada en su cumpleaños. Parece una imagen cualquiera, y de hecho lo es. En ese momento estaba feliz, cantando, y es que así debemos estar los ciudadanos de buen vivir, los ciudadanos que viven de forma honesta, honrada y con el producto de su trabajo limpio. Esos que nos hemos formado en la cultura del esfuerzo. A esos les pido que alcemos la mano para decir: ¡ya basta! al mal gobierno y a los delincuentes.
Quiero aclarar que yo no estoy en contra de MORENA o de un movimiento político en específico solo por estarlo, porque, dentro de ese movimiento, como en muchos otros, también hay gente buena que conozco y puedo decir que son mis amigos. Yo estoy en contra de los malos que están en MORENA, en el PRI o el PAN, y fuera de ellos. Pero sí empiezo por estar en contra de la que muchos dicen que es su presidenta, Claudia, porque su presidenta, a mí no me preside, ni me representa, ni me representan el séquito de malvivientes y corruptos que tiene a su alrededor planeando cómo robar, dominar, callar y dar atole con el dedo al pueblo de México. De todos esos, sí me pronuncio en contra.



