Primero Editores / Ingrid Ahumada M.

Toluca, México.- Este año la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), inició 33 procedimientos por acoso, hostigamiento o alguna conducta de violencia por parte de maestros o administrativos contra las mujeres universitarias, comentó Rocío Álvarez Miranda, Coordinadora Institucional de Equidad de Género.

En entrevista para Primero Editores, indicó que de dichos procedimientos 16 tuvieron determinaciones, de estas 6 concluyeron en separaciones del cargo, 7 fueron suspensiones definitivas, las cuales son aplicadas en personal administrativo o alumnado, además de 3 suspensiones temporales de acuerdo con la gravedad de la conducta.

Ante lo anterior, destacó que esta es la primer administración que genera un procedimiento de responsabilidad universitaria y un área específica para atender estos temas, pues dijo que “es un tema que es complejo e institucionalmente es nuevo”.

En este sentido, precisó que las principales afectaciones o denuncias que emitieron las mujeres fueron por hostigamiento, tocamientos, miradas lascivas, expresiones de carácter sexista y acercamientos indebidos por parte de docentes.

Explicó que para determinar que la denuncia es real, las víctimas no necesitan presentar pruebas -si no las tienen-, pues le dan prioridad “al dicho de la persona”, aunque sí cuentan con pruebas como videos, fotografías, audios, capturas de pantalla o testigos, también los consideran para la investigación del caso, pues dijo que estos deben ser “cuidadosamente tratados, no porque una persona denuncie a otra estamos generando una sanción de manera inmediata, pues debe haber por principio de justicia toda una investigación”.

“De acuerdo con la ley que tenemos en el Estado de México, con la ley estatal de prevención de las violencias de género y otras legislaciones que se han armonizado a partir de la Alerta de Violencia de Género, lo que se da prioridad es al dicho de la persona, por lo tanto no necesitan presentar ninguna prueba si no la tienen”, indicó.

Así, reiteró la importancia de respaldar a las alumnas y administrativas universitarias, pues sus solicitudes de ayuda no tuvieron anteriormente resonancia, pues existió una percepción de opacidad, corrupción o falta de atención por parte de las autoridades para estos temas, lo cual -señaló- pretenden erradicar, por ello, reiteró y destacó que esta es la primer administración en hacer frente a la violencia de género.

“Me gustaría decirles que las cosas cambian y que las personas que estamos al frente de las instituciones somos personas que sabemos del tema, que además somos activistas en nuestro espacio y que estamos comprometidos con la comunidad universitaria y que las conductas de opacidad que antes percibían, ya no ocurren”, comentó al tiempo que reiteró que lo que quieren es recuperar su confianza para generar una cultura de la denuncia donde realmente se confíe en las autoridades y en los procedimientos que emplean.

Principales retos

Señaló que entre los retos se encuentra sensibilizar a la comunidad universitaria, pues aseguró que el tema de género y la violencia contra las mujeres sigue siendo un tabú para la comunidad verde y oro.

Albergan mucha resistencia, no se cree que la violencia de género sea un problema, no se cree que exista, (…) y lo que nos hace falta es tomarnos en serio el tema, por esa razón necesitamos que se genere una cultura de la denuncia pero informada”, refirió.

Indicó que la mayoría de los casos que no procedieron tienen tres naturalezas fundamentales: declaraciones falsas, denuncian hechos de hace años y que van con órganos dentro y fuera de la institución a quienes no les compete el tema.

En este sentido, dijo que aunque la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales fue una de las que más convocó a emitir denuncias por acoso, irónicamente fue de la que menos denuncias tuvieron y, por el contrario, facultades como Ciencias de la Conducta, Derecho, Contaduría y Administración, así como el plantel que se ubica en Amecameca, fueron los planteles de los que más denuncias recibieron.

Para denunciar

Explicó que quienes busquen denunciar algún acto de violencia de género deben primero dimensionar dónde ocurre el hecho, es decir dentro o fuera de los planteles de la UAEMéx, ya si ocurren fuera, la universidad sólo los acompaña y los aconseja sobre a qué dependencia deben recurrir.

Sin embargo, si el caso ocurrió dentro de la universidad se analiza si los hechos ocurrieron con personal administrativo o docente, o de un alumno a personal docente o de alumno a alumno, las víctimas deben colocar sus datos personales, la narrativa breve de los hechos y el nombre de la persona que denuncian, documento que debe ir firmado por la víctima, el cual se envía a la oficina del Abogado General, quien a su vez, inicia la investigación del caso hasta que hay una resolución.

En caso de que los involucrados sean personal administrativo, indicó que prácticamente es el mismo procedimiento, aunque este lo lleva la Dirección de Responsabilidades de la Contraloría Universitaria.

“Si no saben a donde ir y necesitan un órgano canalizador y que les oriente y que les diga cómo va a funcionar, qué va a pasar o que requieren, pueden pasar conmigo como órgano de primer contacto a la Coordinación Institucional de Equidad de Género y yo canalizo sus casos y los voy orientando”, explicó.

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