Por Socorro Valdez
Lenguaje mañanero y manipulador…Hasta cómo votaron, sin que huela ni hieda la queja de Porfirio Muñoz Ledo. El derecho a la vivienda es constitucional, y pobres, muy pobres, no la tienen. El agua, es un derecho, y la recibimos -Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Álvaro Obregón, por mencionar algunas alcaldías- por tandeo, y a veces ni así.
Semanas sin respeto a la garantía constitucional. Existen 29 artículos, ¡29! De derechos individuales para los mexicanos dentro del territorio nacional y en las diferentes embajadas en el extranjero, ¿y cuáles se cumplen a cabalidad? Por mencionar, el quinto (toda personas podrán dedicarse a la profesión, industria, o comercio que prefiera siempre y cuando sea lícito), lo que debiera beneficiar a quien no tiene un trabajo asalariado ni seguridad social, los comerciantes ambulantes, quienes padecen constantes abusos, despojos y desalojan en las alcaldías.
O las personas de la tercera edad, que son “cerillos” sin salario, sólo propinas, igual que las mujeres en gasolineras, que hasta pagan el acceso a la salud y fármacos. Artículo 11º “Toda persona tiene derecho a entrar en la República, salir de ella, viajar de territorio o mudar de residencia, sin carta de seguridad”, claro que no dice, caminando o en camión, porque en carro, al menos un día a la semana, o dos, si hay contingencia y un sábado, “no circula”.
Es decir, no es de facto que se respete un mandato constitucional, ¡No manipule! La educación, también tiene rango constitucional y miles de jóvenes sin acceso a educación superior con selección para decidir, quién ingresa a la UNAM o al Politécnico. En salud hay que explicar, no a reporteros, a médicos, a directores de clínicas, a enfermeras, a trabajadora social, y hasta al policía, que es un filtro y se erige como médico para decidir si entran a urgencias o no, que es constitucional el derecho a la salud. Ya lo es, pero tienen a familiares durmiendo en la calle en espera del parte médico de su hijo, esposa o padre.
Empiece por garantizar ¡trato digno! A eso no se le asigna presupuesto puede ser de facto cambiar. Garantice de inmediato explicarles a los de primer contacto con el enfermo, con palitos y bolitas, si es necesario, que al menos el trato debería ser afable. Ayúdese y ejemplifique con la película de Patch Adams, película de 1998, protagonizada por Robin Williams. Eso sensibiliza, porque no creo, gran señor que haya ido enfermo o con dolor a recibir atención médica en servicios públicos de salud.
Tampoco que le haya faltado la respiración por asma o se haya angustiado porque se ahoga su hijo, y por lo menos, primero tiene que dar sus generales antes de recibir atención médica. Y ya no diga, si no hay carnet, y se le ocurrió por salvar la vida de su hijo ir al IMSS ¡calvario! A explicar porqué tan bruto se olvidó el documento y en una urgencia. ¿Sabe las horas de espera para atención no y en ¡Urgencia!? A veces ni médicos hay. Una vueltecita al hospital “Juan Ramón de la Fuente”, a las clínicas del IMSS e ISSSTE -sólo vaya de fisgón a la sala de espera- o a urgencias, y va a detectar, ¿cuál derecho constitucional? Personas sangrando y en sillas. ¡No hay camas! Vaya y asómese al General, al Infantil.
Vea en qué condiciones están no sólo los enfermos, su ¡familiar! Hasta gasas deben comprar y después ellos regresan enfermos por las horas a la intemperie. Por horas y días de dormir en el suelo en zona insalubre. Antes de morir mi madre, desde antes de ese calvario, ¡12 años! Ya era derecho constitucional la salud, ¡nadie les explicó! Como usted y falleció en espera de cita en ISSSTE para diagnóstico.
Hoy, sin prianistas en el gobierno, -aclaro, porque gusta del pasado y evidenciar quién sí y quien no votó por primero los pobres, los diascapacitados, por la tercera edad, por los niños, esos que esperan a la intemperie y en silla de ruedas o en el piso – ¡Nada, nada, ha cambiado! ¡Empeoró! O ¡Desmienta!, ¿no es porquería la atención médica? Hasta con el Simi, es mejor atención y trato.
¿O porqué ha crecido tanta farmacia y consultorios médicos que cobran 30 pesos? Más de 340 por ciento aumentaron en cuatro años. Unas 13 mil farmacias/consultorios, cifras oficiales, del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) y de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) diariamente atienden a, “primero los pobres”.
Hasta Soriana y Aurrerá tienen médicos para ofrecer consulta inmediata. Mientras en la atención de instituciones gubernamentales de salud, muchos mueren y como ella, mi madre ni por enterados que tenía ¡Cáncer! Pero qué tal, paracetamol y naproxeno, garantizados, igual que la pastilla engañabobos. Me enerva, algo tan sensible como la salud, donde ni la garantía de buen trato, por muy a rango constitucional que lo eleven ¡Mitómano! ¡Demagogo!