Primero Editores / Ingrid Ahumada
Toluca, México.- Hay niños que aprenden solos en casa pues sus padres no pueden acompañarlos durante las clases en línea debido a que regresaron al trabajo de forma presencial y no pueden llevarlos con ellos pues los arriesgan a contagiarse del COVID-19.
Tal es el caso de Ximena Hernández, una pequeña de 11 años que cursa el sexto grado de primaria y se queda a cargo durante el día de su hermana Victoria de solo tres años de edad, juntas siguen clases en línea, hacen tarea y comen, pues sus padres regresan poco antes de las 20:00 horas y aunque ahora la tecnología les permite estar en comunicación constante, no tienen alternativa o persona que esté al pendiente de ellas.
Su padre, Armando Hernández explicó en entrevista que debido a su trabajo en una constructora debe viajar en ocasiones por días, en tanto, su esposa sale de casa durante el día debido a su trabajo y regresa tarde, no obstante, es quien está al pendiente de las dos pequeñas a través de llamadas y videollamadas constantes, monitorea sus actividades y que verifica que estén bien, pues temen que pase algún accidente en su ausencia.
La pandemia los obligó a cambiar su rutina para hacer una vida completamente solos y sin ayuda, pues no piden apoyo a sus abuelos al ser adultos mayores y ambos están considerados vulnerables al estar enfermos de diabetes, por ello, la única opción fue adaptarse a la situación y dejar solas a las pequeñas, aunque para evitar accidentes, su madre deja preparada la comida una noche antes, en su mayoría, cosas que no requieran calentar o hacer uso de la estufa.
“Esta es la primera vez que las dejamos solas, mi hija la mayor es muy responsable y la verdad nos ayuda mucho, pero siempre estamos preocupados, siempre hay miedo de que algo pase y no estemos con ellas”, comentó.
En tanto, Ximena dijo conocer la situación y cuidados que deben seguir durante la pandemia y asegura que entiende que sus padres deben salir a trabajar y su forma de ayudar es cuidar de su hermana.
“Mis papás me dicen que no le abra la puerta a nadie, que no hable con nadie que se acerque a las ventanas y siempre vea que está haciendo mi hermana”.
Entre algunas medidas de seguridad que implementaron en su casa fue tapar los enchufes de su hogar, antes de salir cerrar las llaves del gas, poner candados y seguridad en las ventanas del hogar que dan a la calle y cerrar la puerta principal, misma que ahora cuenta con tres cerrojos distintos.
Si bien la Cruz Roja Estado de México informó el mes pasado que a diferencia del 2019, este año disminuyeron hasta 35% los accidentes en casa durante el periodo vacacional debido a que los padres de familia trabajan desde su casa y ello contribuye a tener mayor vigilancia en los pequeños, no obstante, hay casos como el de Ximena y si bien la principal recomendación es evitar dejar a los menores de edad sin supervisión de un adulto, también sería de utilidad cerrar bien cisternas o pozos, no dejar juguetes pequeños que puedan tragar y ahogarse, proteger los enchufes de la red eléctrica, no permitir el uso de estufas y hornillos de gas y guardar productos peligrosos que puedan ingerir.
