Socorro Valdez Guerrero
Sus rostros, sus características invaden las paredes. Se ven en todos lados. Las difunden, les dicen cómo son, y ¡Nadie las busca! Una alerta, sí, sólo una alerta ¡Ámber! las menciona, grita su desaparición, y después se silencia, porque, ¡nadie las busca!, entonces, ¡hagámoslo nosotros! Nadie las protege de quienes las acechan, entonces, ¡todos cuidémoslas! Cuidemonos, busquémoslas, y hagamos que regresen con vida a casa. No las dejemos solas, no permitamos que ese dolor de no volverlas a ver, te acabe.
No dejemos que estén solas y nadie las busque. Hoy es ¡Ámber! También protocolo “Alba” y “Naranja”, en el Estado de México, y aún así, ¡Desaparecen! ¡Nadie las busca! Son acciones insuficientes, aquí, allá en todo el país, porque ¡Nadie las busca! Sólo alertas, programas de escritorio, sin acciones de calle.
Solamente esa ensordecedora alerta, que sí, ayuda, que sirve como acción inmediata y ¿después?, después ¡Abandono, olvido! Ayer, con esos gobierno, hoy tampoco es diferente. Sólo un anuncio en medios impresos de se ¡Busca! Y también, igual que ahora ¿quién las busca, quién pregunta por ellas? Sólo la familia. No seamos indiferentes.
No las dejemos solas, no permitamos que esas familias se angustien y lloren solas por la desaparición de sus hijas, de sus madres, de sus nietas, de sus sobrinas. La muerte de ellas duele a todas, ¿por qué no ayudar a buscarlas, por qué no buscarlas? Somos millones de mujeres, somos más y ellos, los que las cuidan, son más que aquellos que las acechan.
Hagamos esa cadena social que frena a quienes las ¡Engancha! Hoy son ellas, mañana puedes ser tu. No dejemos solas a esas familias. ¡No las dejemos solas a ellas!.. Ayudemos, ellos no lo hacen, ellos no las buscan. No les importa a esas fiscalías, a esos institutos de la mujer, a nosotras sí. Hagamos unión. Juntemos y unamos fuerzas y ellos, esos que las violan, aquellos que las matas, esos que las levantan, que sin rostro las acechan en cada rincón, en esas calles, en esos estados, sabrán que ¡No, no, están solas! No seas indiferente.
Tienes hijas, tienes hermanas, tienes nietas, tienes ¡Madre! No las dejemos solas. No las abandonemos. Somos más, somos mejores, y podemos cuidarlas, podemos protegerlas. ¡Inténtalo!, ¡intentémoslo! Seamos muchos ojos que las cuidan. Muchos que las buscamos.
Más, los que detenemos muertes. ¡Detengamos violaciones, detengamos que las lastimen, que las desaparezcan!.. No dejemos que las acechen, ¡actuemos! Una alerta institucional, un programa, una condena, una marcha, no son suficiente, porque siguen llevándoselas. 26 años de alerta, y más de mil 227 mujeres desaparecidas sólo en este año.
Muchas niñas y adolescentes, y 60 por ciento, aún con el encierro por COVID. Antes, no fue diferente. A ningún gobierno le importas, a tí, a mi, a todos ¡Sí! ¿Para qué institutos de la mujer en todo el país?, si sin son adorno, un adorno inmóvil, ciego, sordo, discapacitado. Omisos e ¡Inmóviles! Porque ¡Nadie las busca! Hagámoslo, y cuidémoslas. No, no bajemos la guardia y sí, advertimos, ¡Ni una más se llevan!