• México tiene, por lo menos, cuatro millones de toneladas de este elemento, señaló José Vladimir Crespo Fernández
• El costo de una tonelada es de aproximadamente 70 mil dólares, agregó
Ciudad d México.- México, Bolivia, Argentina, Chile y Perú tienen cerca de 70 por ciento de las reservas de litio del orbe, lo cual los ubicará como actores centrales en el tema energético a nivel mundial, afirmó el embajador de Bolivia en México, José Vladimir Crespo Fernández.
Por ello, estas naciones deben trabajar coordinadamente, en función de sus intereses y los del mundo, al entrar en la discusión sobre el manejo de este elemento, dijo al dictar la conferencia “La industrialización del litio en Bolivia”, organizada por el Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM.
El diplomático expuso que durante los siglos XVI y XVII estos países del continente americano fueron el eje de la economía colonial, la cual se basó en la extracción de plata y permitió la acumulación de capital que después impulsó el desarrollo del capitalismo.
“Esta es nuestra segunda oportunidad. Tenemos un producto que puede definir lo que va a ocurrir con la energía del mundo”. Debemos ser más inteligentes y soberanos que con la administración de la plata, insistió en el evento moderado por el director del CIALC, Rubén Ruiz Guerra.
El embajador compartió estadísticas del Servicio Geológico de Estados Unidos –USGS, por sus siglas en inglés- las cuales señalan que su nación cuenta con reservas hasta por 21 millones de toneladas de litio; Argentina 19 millones; Chile, nueve millones; y Estados Unidos, siete millones. “La perspectiva es que México tiene, por lo menos, cuatro millones de toneladas; por eso interviene en esta conversación”, aseguró.
Además, expresó que nuestro país tiene varias centenas de lugares donde se requiere explorar si hay este elemento químico y en qué cantidad.
Crespo Fernández expuso también que estimaciones indican que para el año 2030 se demandarán cerca de un millón 600 mil toneladas de litio a nivel mundial, ocho veces más que lo requerido en 2015. Su precio se modifica radicalmente: en 2020 la tonelada costaba cinco mil dólares y actualmente 70 mil dólares, aproximadamente, agregó.
Recurso estratégico
Asimismo, comentó que el manejo e industrialización del litio en su país, hasta ahora, ha sido estrictamente gubernamental. Esto fue establecido en su Constitución Política de 2009; la Ley de Minería y Metalurgia, del 2014; y en la Ley 928 por la que se creó la Empresa Pública Nacional Estratégica de Yacimientos de Litio Bolivianos, de 2017.
En esa nación no hay concesiones sobre este elemento a ninguna empresa y/o persona. La fase extractiva está destinada 100 por ciento al Estado, a través de la citada Empresa Pública. Sin embargo, en la industrialización, el Estado puede asociarse con compañías privadas, nacionales y extranjeras, pero mantendrá el 51 por ciento de participación.
El litio, detalló, se presenta en la naturaleza de tres formas: en salmueras (lagos y salares); sedimentos (arcillas y limos); y rocas. En Bolivia se encuentra en lagos y salares mientras que en México en sedimentos y rocas.
En Bolivia, precisó, se obtiene carbonato de litio, cloruro de litio e hidróxido de litio que en una primera etapa de industrialización se convierten en materiales catódicos, que son usados para elaborar baterías para autos híbridos y eléctricos. Además, hay otros derivados usados por la industria médica, así como para la elaboración de fertilizantes.
Crespo Fernández destacó que comenzaron a licitar fábricas para baterías, las cuales se prevé funcionen en 2023 y trabajen con cerca de 15 mil toneladas de carbonato de litio.
Celebró que México creó la empresa pública que se encargará de la exploración, explotación y aprovechamiento del recurso. Confió en que las capacidades técnicas, científicas y económicas de nuestra nación permitirán hacer frente a los retos que plantee su utilización.