Segunda Parte
Por Zuleyka Franco
En la Primera parte de este especial, conocimos las características sobre la Presión, la Dirección y las Líneas… En esta segunda parte y después de conocer las características de los diferentes Trazos, empezaremos a descifrar las diferentes Líneas de un Dibujo de la Figura Humana DFH hablando sobre las Líneas Seguidas, Decididas y Sin Interrupción en el dibujo, ya que cuando se reflejan este tipo de líneas el sujeto pasa de pensamiento a la acción, sin vacilaciones, es una persona segura de sí misma y de lo que hace. Una vez que toma posesión y decide realizar una acción obra con rapidez y de acuerdo a su determinación. Si el dibujo es de Trazos Rápidos, bien proporcionados en su conjunto y la presión de los trazos es firme, el sujeto aborda los problemas y realiza sus intercambios con os demás con plena iniciativa, confianza y resolución, sin crear conflictos a los demás, ni tenerlos consigo mismo. Si el conjunto de las figuras y las partes aparecen desproporcionadas, discordantes, mal organizadas o con anomalías, la interpretación debe hacerse en sentido negativo; ya que entonces estaremos hablando de un sujeto impulsivo, apasionado, individualista y mal integrado social y profesionalmente.
Si las Líneas son Flojas, Vacilantes y frecuentemente Rotas, son propias de sujetos asténicos, débiles de espíritu y de carácter, con frecuentes titubeos y vacilaciones que inhiben la acción y la decisión. Las Líneas Débiles con poca presión y vacilantes, hacen al sujeto permeable, vulnerable a los acontecimientos e indefenso frente a las situaciones adversas que requieren de lucha. El único recurso de estos sujetos para mantenerse a flote en la vida es la “dependencia-sumisión”, los bloqueos psicológicos a causa de la timidez, la inseguridad y la falta de energía, crea en ellos la fuerte propensión a la angustia y la ansiedad. Si la vaguedad del trazado (flojedad o blandura) es importante, puede dar lugar a pérdidas de atención, a olvidos, perturbaciones emocionales y coartatividad, inoperantes, principalmente si el sujeto se siente observado por un superior, donde hay una deficiencia para ciertas tareas a causa de la frecuente pérdida de autodominio emocional.
Líneas Fuertes, Rectas e Inflexibles. La inflexibilidad es una fijación a ideas, posiciones actitudes en sujetos que tienden a regresar por una motivación o necesidad profunda a una fase de desarrollo que quedó pendiente de satisfacer. La inflexibilidad, la incapacidad de ceder incluso a las evidencias demostradas, tiene su origen en frustraciones afectivas dolorosas sufridas en la infancia. Es un trauma de una privación que puede estar relacionada con el “Complejo de Edipo o Electra”, o con tendencias homosexuales reprimidas. Tienden a dar a las figuras en el dibujo formas cuadradas o rectangulares, lo que supone, salvo en dados casos una adaptación, una pobre convivencia y el enfrentamiento con las peripecias de la vida. Si las líneas rectas son Delgadas, Tenues o con Poca Presión en un DFH, es reflejo de una vitalidad o lívido débil, el sujeto se defiende con su postura rígida contra su vulnerabilidad interna. A veces ciertas Líneas Muy Fuertes o Alargadas denuncian trastornos de tipo neurótico o tendencias paranoides. Cuando en los Machovers de Figuras Humanas los contornos están marcados con Líneas Fuertes y los detalles internos con Trazos Débiles, cabe sospechar que el sujeto pone un muro entre él y su entorno o bien, defiende su “Yo” de una vulnerabilidad al exceso de sensibilidad, tomando precauciones defensivas contra choques dolorosos o posible hostilidad real o imaginada, o bien posee un alto concepto de sí mismo (orgullo) que le impide comunicarse abiertamente con los que le rodean, pues ve menos a los demás.
Cuando nos encontramos con Líneas Inseguras al trazar el contorno, denotarán fallas en el intento de dar configuración a los DFH; la angustia a veces de manera repetitiva con los mismos trazos, refleja la angustia del sujeto que en circunstancias anormales o inesperadas, le falta confianza en sí mismo para salir airoso de las situaciones, intentando vencer su estado interno de vacilación, de inquietud y de inseguridad, el sujeto se balancea sobre varias ideas de corrección, queriendo perfeccionar lo que cree defectuoso; deja la huella de su deseo de perfección, pero no la eficacia de su acción. Se trata de personas que frente a situaciones nuevas o desacostumbradas, quedan indecisos o como obnubilados, sin saber qué solución puede dar a los problemas.
Si nos encontramos con Líneas de Presión, Forma, Dimensión y Dirección Descontroladas, estaremos frente a la dificultad para reprimir impulsos, agitación, incapacidad para planificar las tareas, impulsividad. Con un sujeto que pasa de la excitación que produce cada estímulo interno o externo o la reacción inmediata sin que medie la reflexión. En todo caso, la reflexión puede venir posterior de los hechos consumados, este exceso de precariedad puede ser patológico.
La Línea Recta se suele utilizar para enmarcar la cara, el tronco o las extremidades; nosotros,s las Líneas Rectas en los DFH las interpretamos como digno de un carácter escueto, firme, decidido, acostumbrado a abordar los problemas de manera simplificada, atendiendo el conjunto esquemático y la síntesis de las cuestiones. Como buena capacidad mental, desprovista de influencias sentimentales. En sentido negativo podría interpretarse como falta de habilidad, como rigidez de carácter y falta de consideración en la forma de tratar las cuestiones o asuntos de los demás, es decir, como falta de tacto en las relaciones humanas.
En cambio si la Línea es Curva y tiene un predominio más o menos constante en su empleo en un DFH, suelen expresar una expansión adaptativa, un comportamiento suave y empático en el que la palabra, el gesto y la acción tienen un aire conciliador, es decir, el sujeto tiene una comprensión tolerante, una actitud benévola y un ánimo optimista y sociable. En un sentido negativo los DFH hechos con Líneas Curvas Flojas, Mal Coordinadas y Con Distorsiones en el aspecto de las figuras, no sólo reflejan una carencia de tono muscular y nervioso que lleva al sujeto a la indolencia, a la ausencia de deseo o interés por cualquier esfuerzo activo, a la dificultad para tomar iniciativas en la solución de los problemas vitales, sino que puede traducir también la claudición fácil a la presión de otros y dejarse influenciar negativamente. Cuantos más signos de distorsión, desproporción y falta de equilibrio se observe, tanto mayor serán los desordenes mentales y las cualidades neuróticas o psicóticas del sujeto.
Las Líneas Cóncavas hacia la Derecha. Los dibujos con contornos con líneas cuya concavidad se dirige hacia la derecha (lado derecho de las figuras), parece corresponder a tendencias e impulsos y necesidades que se orientan hacia un contacto abierto y comunicativo con los demás (buena sociabilidad y empatía). Si las Líneas tienen Concavidad hacia la Izquierda (las líneas cóncavas miran hacia la izquierda), expresarán tendencia a recordar escenas o vivencias del pasado relacionadas con la madre o con etapas de la vida infantil. Otra es la tendencia a retener a inhibir o reprimir impulsos primarios, deseos, tendencias o necesidades que podrían plantear al sujeto algún complejo de culpabilidad o conflicto con el entorno.
Si vemos Líneas Onduladas dentro de un DFH o Serpenteadas poco afirmadas, es decir, blandas, inseguras y evasivas, corresponderán en sentido positivo a una actitud alegre y no comprometida a un suave balanceo que escapa a las situaciones comprometidas utilizando bromas o salidas de escurridizo humor, será una persona que cambie fácilmente de rumbo sin dejar atrás ningún conflicto, roce o clara posesión. Su carácter no es nunca igual, pero deja impresión agradable por donde pasa. En sentido negativo las Líneas Onduladas o Serpenteadas nos recuerdan a las serpientes, astutas sigilosas, escurridizas, ambiguas, que evade con suma facilidad. Cuando más débil e imprecisa es la estructura de los dibujos (déficit de energía psíquica y nerviosa), la sensibilidad del sujeto será más vulnerable, impresionable y vacilante. La actitud evasiva en este caso, es un mecanismo de defensa frente a la angustia, la ansiedad, los complejos de culpabilidad y la propensión al sobresalto, al desequilibrio emocional.
Cuando veamos Líneas en Guirnalda (como una “m” volteada hacia arriba) estaremos viendo el reflejo en general de una disposición abierta a las impresiones más variadas, ya sea sentimientos y opiniones de los demás o a los acontecimientos externos. Cuando el trazo el débil (delgadez, poca precisión y presión en trazos), el sujeto es influenciable e indeciso, excesivamente dúctil e incapaz de mantener su propia individualidad e independencia. Y por último veamos que nos dicen las Líneas en Arco dentro de un DFH; la notable existencia de arcos en los contornos o en el interior de los Machovers en las partes de las figuras donde no es preciso hacerlo, señala en general, los gestos defensivos de desconfianza y de salvaguardar el “Yo”. Los Arcos en zonas donde no se necesitan pueden reflejar la tendencia a la actitud de encubierta, la elaboración de una conducta en la que el sujeto oculta sus lados débiles y quiere presentarse en el exterior ostentando un prestigio, méritos y cualidades insuficientes como respaldo y rebasado por la realidad.
Con estas características podemos darnos una idea de todo lo que se puede encontrar en un Dibujo de la Figura Humana y damos paso a las siguientescaracterísticas, con las que conoceremos el significado de los Sombreados.
El “Sombreado” en general ha sido un indicador de angustia, como opresión del ánimo, impotencia, inseguridad o inferioridad, que está expuesta a peligros reales o imaginarios, determinantes de estados internos de sensación penosa, malestar profundo, inquietud extrema y miedo irracional. Este signo es tanto más negra (obscura) y extensa es la zona o el área sombreada.
El sujeto que realiza sombreados en sus DFH, muestra deseo de querer protegerse contra cualquier influencia o estímulo perturbador que esté relacionado con lo que representa la zona del dibujo sombreada.
Comencemos por conocer el Sombreado de la Cara de los DFH, Karen Machover encontró esta anomalía en sujetos con perturbaciones emocionales graves, dominadas por la ansiedad y con un concepto muy pobre de sí mismos. También se conoce como “síndrome gráfico” en delincuentes agresivos con tendencia al robo. Los sombreados los hemos visto en sujetos con “problemas de adaptación social”, principalmente faltos de confianza en sí mismos.
Los Sombreados del Cuerpo y Extremidades son por ejemplo, indicio de problemas “psicosomáticos” y “ansiedad” por el cuerpo. La persona tiende a estar observándose continuamente, hasta el acecho de cualquier pequeña sensación molestia que percibe en su organismo.
Su preocupación “hipocondriaca” por el propio cuerpo, su egoísmo y egocentrismo unido a su “ansiedad”, hace al sujeto fatigante para los que lo rodean. Siempre está hablando de sus síntomas de enfermedad, generalmente imaginados, fantaseados y preocupantes. Requiere que los demás estén escuchando constantemente y sus excesivas reclamaciones de atención no son satisfechas, se llena de mal humor, acude a ver a varios médicos, a veces más para sentirse escuchado que para recibir un tratamiento.
Los Sombreados en los Brazos sin embargo, pueden estar relacionados con sentimientos de “culpabilidad”, por algo realizado con las manos como la masturbación o apropiarse de algún objeto. Puede indicar también complejos de culpa por agresiones físicas a los demás.
Cuando hay Sombreados en las Piernas serán indicios de fallos o preocupaciones en el aparato locomotor, la ansiedad en este caso, puede centrarse en sufrimientos de “inferioridad” por el tamaño del cuerpo, por deficiencias o malformación de las piernas o también preocupación motivada por complejos sexuales. Cualquier sombreado es síntoma de ansiedad y el hecho de que aparezcan sombreados en los DFH no nos permite otra cosa que sospechar con relativa seguridad que el sujeto padece “angustia” sobre alguna actividad, real o fantaseada, relacionada con los órganos localizados en el área donde surge tal sombreado.
Sombreados en las Manos, es indicador de alguna situación “conflictiva” o de pensamientos rechazados que producen angustia con relación a las manos, al igual que los brazos, puede tratarse de algún “complejo de culpabilidad” de actividades realizadas o “fantaseadas” con las manos, a veces ciertos problemas psicosomáticos como el temblor, el tener las manos feas (según su apreciación), algún dedo cortado o atrofiado, etc., puede ser motivo de angustia, así como lo decíamos en el sombreado de brazos que puede ser de igual manera por sentir culpa de una acción como la “masturbación”.
Si hay Sombreado en el área del Cuello, puede haber una existencia de situaciones conflictivas o de pensamientos en los que el sujeto ha de realizar verdaderos esfuerzos para controlar impulsos rechazados por el “Súper Yo” o que la consciencia reconoce como “inaceptable” “violento” o “inoportuna”alguna acción. Estos impulsos pueden tener un sentido contrariante y agresivo en su dirección del Yo a Tú.
Si el cuello está dibujado con líneas rectas e inflexibles, los sombreados pueden reflejar la lucha del sujeto entre sus “impulsos violentos” y su “autocontrol rígido” por ejemplo. Puede ser el caso de individuos que son intransigentes, polémicos, inconformistas y agresivos en la intimidad y en cambio en la esfera profesional y social se muestran humildes y retraídos. En este caso, hemos notado este signo de sombreado en sujetos con una “nuez de Adán” muy salida o con gran sotabarba (papada) descendiendo sobre el cuello (complejos físicos en esta parte del cuerpo).
Sombreados en el Pecho Masculino o en la zona de los Senos Femeninos. Cuando ambos sombreados son hechos o aparecen en dibujos realizados por varones, puede tratarse del deseo de destacar la propia fuerza o personalidad, a pesar de la posible “dependencia” económica o moral de la mujer. Si es la fémina la que los realiza, puede sospecharse que ésta mujer vive afectada por preocupaciones cancerosas en los senos o preocupaciones sexuales que la inhiben frente al varón.
Cuando encontramos Sombreados en el área de los Órganos Sexuales, normalmente la angustia o ansiedad del sujeto varón o fémina, puede estar relacionada a su “función sexual”. Hemos observado éste síndrome gráfico en mujeres con un embarazo no deseado o temido, y en el caso de relaciones sexuales “ocultas” y que se teme pueden ser descubiertas.
Así podemos darnos cuenta que todo lo relacionado al Sombreado en un Dibujo de la Figura Humana o Machover, tiene que ver con angustias y culpas. Más adelante hablaremos de los Retoques, las Bordaduras, las Manchas o Borrones, las Tachaduras, así como de las Transparencias, así que no dejes de seguir los siguientes artículos en los que aprenderás características que no conocías sobre los DFH.