Juan Francisco Baeza
No es novedad hablar del beneficio que los animales le pueden traer al humano, ya sea en cuestión alimenticia, o incluso para combatir enfermedades comunes.
Esta vez un estudio revelado por investigadores de la Universidad de Stanford lograron encontrar dos compuestos en el veneno del escorpión Diplocentrus melici, los cuales pueden eliminar la bacteria que provoca la tuberculosis.
La investigación comenzó luego que científicos mexicanos descubrieron que el sistema del escorpión desprende más de una toxina. Después de sintetizar los compuestos del veneno se descubrió que son dos benzoquinonas, moléculas que contienen propiedades antibacteriales.
Sin embargo, los científicos hasta el día de hoy trabajan en poder identificar los elementos esenciales de estos compuestos y crear un fármaco sintético para salvaguardar el bien del escorpión, ya que su veneno es uno de los materiales más preciados en la población mexicana.