Por Angélica Rangel
Este fin de semana ha sido de altas y bajas dentro de la Liga MX, el partido que más incertidumbre generó fue el que iniciaría la jornada 14 del balompié mexicano.
Veracruz vs Tigres estuvo en los reflectores principales de la prensa nacional e internacional. Todas las miradas estaban en el club escualo que desde hace ya tiempo ha estado inmerso en el ojo del huracán por los adeudos que la directiva tiene con el club.
El silbante Fernando Hernández dio el pitazo inicial. Sin embargo, los Veracruzanos no movieron ni un dedo, eso ya estaba más que predicho por el medio futbolístico. Tigres atestó el primer golpe de la mano de Vargas, Jurado solamente fue a recoger el balón de su portería, siguió el partido y Gignac volvió a herir al tiburón.
Todos estaban expectantes ya que el “Tibu” no se movió durante los dos goles que le hizo Tigres. La tribuna felina festejó los goles de su equipo, ellos estaban felices, pero se olvidaron todos ellos de algo muy importante, el “fairplay”.
La solidaridad y compañerismo estuvo ausente en “El Pirata”, Tigres no sabe lo que son estas palabras, ellos sabían lo que Veracruz estaba pasando y ellos estaban de acuerdo con la protesta que el equipo estaba realizando, pero no les importó y golpearon la dignidad de un equipo herido que ya muy poco tiene que perder.
Tigres sigue demostrando porque nunca será un equipo grande, ya que, un equipo grande no lastima a un débil, no busca romper un récord de 100 goles en la Liga durante una protesta, no les dice a sus compañeros de profesión que atraviesan una dura situación, “¡Hey, no es para tanto ya pónganse a jugar!, no señores eso no es de un equipo grande. Un equipo grande no juega un minuto en solidaridad con sus compañeros, un equipo grande se toma la foto abrazados con los rivales sin importar los colores, porque antes que enemigos son compañeros.
Gracias Veracruz por mostrar la cara, por hacernos saber a todos lo que el Club está viviendo, sabemos que no solo es el primer equipo varonil, sino que son todos; tanto ligas menores como el equipo femenil, cuerpo médico y técnico. Fuiste valiente al hacerlo y mostrar hermandad durante la conferencia de prensa, aunque el rival que te tocó no supo verlo, porque ellos solo son grandes de cartera, no de corazón.
Felicidades André Pierre-Gignac, tuviste tu gol 100. Felicidades Tigres por seguir demostrando que eres solo un “pobre con dinero”, felicidades aficionados felinos por demostrar que la unión no importa mientras tengan sus tan ansiados tres puntos.
El futbol mexicano está con Veracruz, cada uno apoyando desde su trinchera y esperemos que esto acabe pronto para cada uno de los integrantes del club, todo esto de la mejor manera.
