Toluca, Méx.- La violencia familiar se sostiene con roles de género tradicionales sobre el hombre y la mujer, y estereotipos heteronormativos que asignan conductas y emociones de acuerdo a ello, aseguró la capacitadora de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), Ana Cecilia Pérez Avilés quien dictó la video conferencia Violencia Familiar, en el marco de las acciones del Día Naranja para fomentar la igualdad de género y prevenir la violencia contra las mujeres.
La violencia, incluida la que se da en el núcleo familiar, aseveró la capacitadora, puede analizarse a partir de dos orígenes: estructural y cultural, cuya manifestación es directa o indirecta y visible o invisible, de acuerdo con el investigador de estudios sobre la paz Johan Galtung, quien creó el triángulo de la violencia como un concepto para explicar la dinámica de ésta en los conflictos.
Según Galtung, explicó Ana Cecilia Pérez, la violencia es como un iceberg, en la parte superior del triángulo, como en la parte visible de un iceberg, está la violencia directa y delictiva. Sumergida, no visible y mucho más voluminosa, están la violencia estructural y la cultural.
Son éstas últimas, precisamente, las formas que permean en un grupo familiar al igual que en una estructura social; en este sentido, una de las alternativas para desmantelar los mitos y los daños acerca de los roles de género y los estereotipos que generan violencia es a través de la educación y la información, así como de la enseñanza de los derechos humanos y la cultura de paz en el ámbito familiar, para contribuir a que las y los integrantes de una familia practiquen la inclusión, el respeto a la dignidad de la persona y la no discriminación, aprendiendo a valorar los ambientes de paz y derechos humanos.