Guanajuato.- La tarde de este domingo fue ejecutado el reportero Alejandro Martínez Noguez, conocido como “El Hijo del Llanero Solitito”, cuando regresaba de una cobertura informativa por un accidente ocurrido sobre la carretera Celaya.
El periodista se trasladaba a bordo de una patrulla de la Policía Estatal de Guanajuato debido a que desde noviembre del 2022 contaba con medidas de protección por parte del gobierno de esa entidad, tras sufrir un atentado en Celaya, ciudad donde residía regularmente.
En el reporte preliminar se indica que el comunicador del medio de comunicación ‘El Hijo del Llanero Solititito’, viajaba en la parte trasera de la patrulla cuando sujetos armados en una camioneta blanca se les emparejaron y lo atacaron al igual que sus escoltas.
Testigo informan que el infortunado periodista fue impactado por las balas en el cuerpo y la cabeza dejando graves heridas. Dos de los agentes que lo custodiaban también resultaron lesionados.
Al momento, como sucede en México y en particular en el estado de Guanajuato,la entidad con mayor homicidios en todo el territorio nacional.
reporteros sin fronteras Durante el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, México se ha mantenido como el país con el mayor número de periodistas asesinados: al menos 37 en seis años y con el Alejandro Martínez de subirían a 38.
Con 37 periodistas asesinados y cinco desaparecidos durante el sexenio de su mandato, el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, ha fracasado en detener esta tragedia y en la lucha contra la impunidad de los crímenes contra los periodistas. Sin embargo, en su discurso de toma de posesión, el 1 de diciembre de 2018, afirmó: “No habrá más periodistas asesinados”, refiere RSF.
“El balance es desolador: más allá de la cifra aterradora de reporteros que han perdido la vida, no se ha llevado a cabo ninguna reforma del sistema de protección de los periodistas, a pesar de las recomendaciones sobre la materia de organizaciones como RSF. Peor aún, el presidente ha tenido, en repetidas ocasiones, un discurso hostil contra la labor de los medios, en particular durante sus conferencias de prensa matinales diarias.
“Andrés Manuel López Obrador se acerca al final de su mandato dejando tras de sí un dramático balance, fruto de la normalización de la violencia contra los periodistas. No ha priorizado su protección y ha permitido que prospere una espiral de violencia contra la prensa y un mayor número de ‘zonas de silencio’, erosionando el derecho a la información en el país. Con vistas a las elecciones generales del 2 de junio, RSF pide a los candidatos que se comprometan a adoptar por fin medidas concretas para proteger a los profesionales de los medios y luchar contra la impunidad de los crímenes cometidos contra periodistas. escribió Artur Romeu, director de la Oficina de RSF en América Latina.