Tlalnepantla, Méx.- “Ser liberal significa reconocer las libertades y derechos fundamentales como inherentes al ser humano”, enfatizó Raciel Pérez, presidente municipal de Tlalnepantla, al conmemorar el 219 Aniversario del Natalicio de Benito Juárez.
“El liberalismo mexicano se gestó en el humanismo del siglo XVIII y sirvió como fuente de inspiración de los movimientos revolucionarios de los siglos 19 y 20, también niega que el poder sea otorgado a un gobernante por voluntad divina y asegura que solo el pueblo es el único titular de la soberanía”, destacó como legado del Benemérito de las Américas.
Previo al acto cívico, el alcalde develó una placa en el edificio ubicado en avenida Morelos. El 12 de julio de 1867, se alojó en esta casa Benito Juárez siendo presidente de la República y convirtió este edificio durante unas horas en sede de los Poderes de la Nación.
De origen oaxaqueño, recordó, Benito Juárez García nació en el preludio de la primavera de 1806 y fue un niño de sangre zapoteca. A sus 25 años inició su carrera pública y desempeñó cargos como diputado local, juez civil, magistrado, ministro de justicia, diputado federal, gobernador del estado de Oaxaca y presidente de la Suprema Corte de Justicia, hasta convertirse en presidente de la República.
“Hoy con profunda vocación republicana y orgullo nacional, desde este rincón de nuestra patria, que es nuestra pequeña patria Tlalnepantla, rendimos homenaje a la memoria, al fulgor, al legado de un mexicano universal… honrar a Juárez es honrar a la patria”, expresó Pérez Cruz.
Recordó que Juárez se enfrentó a los reaccionarios y conservadores que pretendieron ser gobernados por un emperador rubio austriaco, combatió con estoico patriotismo a quienes pretendieron detener el rumbo de la historia. En aquel entonces, el país estaba en bancarrota y el invasor pisó la Ciudad de México profanando el territorio nacional.
“Sin dinero, cañones, pan, ni pólvora, Benito Juárez abandonó el Palacio Nacional y emprendió un éxodo itinerante por el norte del país. Errante cruzó montañas, sierras, desiertos, acosado padeció hambre y se detuvo en las ciudades, piso rancherías, perdió hijos, escuchó de cerca el estruendo de los cañones, pero nunca se rindió, perseveró en la lucha, contra viento y marea para evitar el triunfo del imperio”, mencionó.
Raciel Pérez Cruz estuvo acompañado por los familiares del dueño de este edificio, Jorge Alejandro Espinoza Zierold, quien falleció hace un año y es recordado como un distinguido habitante de Tlalnepantla.
Integrantes del cuerpo edilicio montaron una guardia de honor y colocaron una ofrenda floral en el busto de Benito Juárez colocado en la explanada del Palacio Municipal para preservar el legado y enseñanzas del Benemérito de las Américas.