Por Ricardo González Amaro

Chilpancingo, Gro.- Después de una violenta jornada que se vivió el sábado 8 de julio en Chilpanchigo y Tixtla, Guerrero, este lunes, manifestantes rompieron el diálogo y bloquearon la autopista del Sol a la altura del parador del marqués al sur de Chilpancingo, y tomaron las instalaciones de gobierno.

Los pobladores que irrumpieron en Chilpancingo esta mañana, después de una jornada de movilización, se concentraron en la Autopista del Sol, a la altura del Parador del Marqués, donde bloquearon la vía luego de romper una mesa de negociación con el secretario General de Gobierno, Ludwing Marcial Reynoso Núñez.

Los más de 2 mil pobladores mantuvieron bloqueados los cuatro carriles de la Autopista del Sol, es decir que el paso hacia Acapulco, y del puerto a la Ciudad de México se mantuvieron cerrados desde las cuatro de la tarde, según mencionaron.

Su movilización fue para exigirle a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda obra pública, carreteras y puentes para cinco municipios de las regiones Centro y Montaña.

De acuerdo con lo dicho por los manifestantes, en una conferencia de prensa en el bloqueo, se concentraron en el lugar pobladores de los municipios de Chilapa, Hueycantenango, Acatepec, Quechultenango y Atlixtac pidiendo una audiencia con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda.

Por su parte la Fiscalía General de la República (FGR), indicó que en estos poblados tiene presencia un grupo criminal denominado Los Ardillos y es por la inseguridad que prevalece en Chilpancingo, Guerrero, pobladores que se iniciaron estas manifestaciones y disturbios en los que ya contabilizó un saldo de cinco conductores asesinados, dos de ellos calcinados, tres heridos, tres unidades de transporte incendiadas y una particular.

Hoy la violencia se recrudeció y la ciudadanía tomó vehículos blindados paea poner a marchar a los agentes policiacos, y respectivamente, los manifestantes llevaron palos, machetes y piedras en sus manos.

Después que estos pobladores ingresaron a la ciudad y recorrieron avenidas en el sur de la capital, derribaron una puerta en el Congreso local y otra en la sede del Poder Ejecutivo con una camioneta blindada que le retuvieron a la Policía Estatal.

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