Por Rosa Lealde
Este jueves España se convirtió en el séptimo país en legalizar la eutanasia al aprobar una ley que despenaliza y regula la ayuda médica para el derecho a morir y a la prestación del sistema nacional de salud.
España se une a países como Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Colombia, Canadá y Nueva Zelanda en legalizar “el bien morir”.
Quienes podrán solicitar su derecho a eutanasia serán los mayores de edad que sufran “una enfermedad grave e incurable” o un “padecimiento grave, crónico e imposibilitante” que afecte a la autonomía y que genere un “sufrimiento físico o psíquico constante e intolerable”. El proceso será autorizado por personal médico, de enfermería y juristas, en este el solicitante deberá confirmar repetidas veces el deseo de seguir adelante y podrá desistir en cualquier momento.
La ley entrará en vigor en España dentro de 3 meses y asegurará “libertad para decidir”, aunque claro hay opiniones divididas en las que se creen que con la entrada en vigor de esta ley el país podría convertirse en una escala para el “turismo eutanásico”