Redacción
Ixtlahuaca, México.- Con carreras de caballos, danzas, feria, banda y mucha devoción, celebraron a San José Obrero en la comunidad de San Pedro de los Baños del municipio de Ixtlahuaca.
Como cada año, cientos de personas aprovecharon el 1 de mayo como día festivo para reunirse en familia, convivir y celebrar al Santo de los obreros en este poblado.
En medio de los festejos, destaca la tradicional carrera de caballos, en la que se reúnen más de 180 jinetes que corren por aproximadamente un kilómetro. Al final, a todos los participantes se les premia con algún pollo, pato, conejo, palomas y demás pequeños animales domésticos que los habitantes del lugar donan generosamente para la celebración de la fiesta.
En cuanto a los corredores, participan niños, niñas, jóvenes, mujeres y hombres de todas las edades, no hay distinción alguna para que puedan competir, solo necesitan de un caballo y de perder el miedo para galopar a más de 50 kilómetros por hora.
Esta celebración sirve como punto de encuentro entre los diversos pueblos de la región de “Los Baños”, en una capilla que está situada a las orillas de una laguna. Donde antes brotaba agua termal, que a causa de las disputas entre dos pueblos, se fue, según comentan los pobladores.
En la festividad, los “capitanes”, quienes son los encargados de llevarla a cabo, dan de comer a todos los asistentes, asegurando que la instancia para los invitados sea de total agrado.
Del mismo modo, acuden diferentes danzas para armonizar el ambiente. Este año solo contaron con la danza azteca, que por un par de horas ofreciendo incienso, montaron sus características coreografías retumbando tambores y haciendo sonar conchas de mar.
Al lugar también asisten juegos mecánicos para darle a la fiesta otro motivo de atracción. Asimismo, sirve para la economía local, ya que gran parte de los comerciantes son personas de la comunidad.