Expertos destacan una ventana de oportunidad ante el desgaste del vínculo con Estados Unidos
Ciudad de México.- La relación entre China y América Latina se fortalece y presenta una ventana de oportunidad estratégica, afirmaron expertos durante la mesa de análisis “La CELAC y China frente a la reconfiguración del orden global”, organizada por el CIALC de la UNAM.
El investigador José Briceño Ruiz subrayó que China se posiciona como un socio confiable para América Latina, al ofrecer una cooperación birregional basada en la igualdad, pluralidad, no injerencia y beneficio mutuo, a diferencia del enfoque tradicional de Estados Unidos.
China impulsa cooperación y becas para la región
Briceño Ruiz destacó acciones concretas de China, como:
- 9,200 millones de dólares en líneas de crédito a países de la CELAC
- Nuevas inversiones en infraestructura, energía limpia, inteligencia artificial y telecomunicaciones
- Exención de visado para ciudadanos de Brasil, Chile, Argentina, Perú y Uruguay
- 3,500 becas gubernamentales y 10,000 lugares de capacitación en China
- Programas para aliviar la pobreza y cooperación tecnológica
“El IV Foro China-CELAC podría convertirse en una plataforma para que los países latinoamericanos construyan un nuevo orden internacional más justo”, afirmó.
América Latina, atrapada entre dos potencias
Por su parte, Claudia Edith Serrano Solares, académica de la FES Aragón, remarcó que el Foro China-CELAC, creado en 2015, representa una alternativa para no depender exclusivamente de Estados Unidos.
Advirtió que América Latina enfrenta desafíos internos de descoordinación, ya que algunos países como Ecuador buscan reanudar relaciones preferenciales con Washington, mientras otros se alinean más con Beijing.
“Cambiar de amo no significa ser libre”, citó Serrano al pensador José Martí, cuestionando la dependencia hacia potencias que disputan la hegemonía global, incluso en sectores estratégicos como hidrocarburos, litio y alimentos.
Brasil, clave para el equilibrio geopolítico
El politólogo Roberto Goulart Meneses, de la Universidad Nacional de Brasilia, expuso que Brasil regresó a la CELAC con la llegada de Lula da Silva, tras el retiro durante el mandato de Bolsonaro.
China, detalló, ha invertido 66 mil millones de dólares en Brasil desde 2009, lo cual ha fortalecido el vínculo bilateral, independientemente de foros multilaterales. Sin embargo, destacó la necesidad de que Brasil participe en espacios como la CELAC, donde pueda promoverse el multilateralismo y el diálogo político regional.
Un nuevo equilibrio en construcción
Los especialistas coincidieron en que la relación entre China y América Latina vive un momento de redefinición. La creciente tensión con Estados Unidos, sumada a los efectos de la política exterior del expresidente Donald Trump y su posible retorno, obliga a los países de la región a replantear sus alianzas, sin caer en una nueva dependencia.
El fortalecimiento de la CELAC y su interlocución con potencias emergentes podría ofrecer a América Latina herramientas económicas y diplomáticas para afianzar su soberanía y construir una voz colectiva en el nuevo orden global.