María Elena Maldonado

Los empresarios tan denostados por este “gobierno” tienen una larga historia en la filantropía, paralela a la historia de México, ejercida a través del compromiso con sus comunidades, con la ciudadanía y el medio ambiente. Son la columna vertebral, la fortaleza  de la economía, los creadores de empleos, los que incrementan el erario y producen bienestar.  Como en cualquiera  de los grupos humanos, los hay honestos, comprometidos, éticos y algunos todo lo contrario. Por ello los gobiernos tienen la responsabilidad que les fue otorgada por los ciudadanos para vigilar que se cumpla la ley y los reglamentos. Esta vez les relato la historia del CEMEFI, Centro Mexicano para la Filantropía.

      Uno de estos hombres que han trabajado por un México mejor has sido Don Manuel Arango,  quien el 7 de diciembre de 1988  fundó el Centro Mexicanos de Instituciones Filantrópicas, que después cambiaría su nombre a Centro Mexicano para la Filantropíay, desde entonces, se ha dedicado a convencer a las empresas de la importancia que tiene la Responsabilidad Social, más allá de ser un requisito en sus reportes anuales. 

     Manuel Arango Arias Con sus hermanos Jerónimo y Plácido abrieron la cadena de supermercados Aurrerá, con Suburbia, los restaurantes Vips y El Portón conformaron el Grupo Cifra, uno de los corporativos más exitosos de su tiempo y que serían finalmente vendidos a Walmart. Con el mismo talento y energía que lo hizo un exitoso empresario, ha hecho de su pasión el alcanzar una sociedad más sana, justa y democrática dedicando buena parte de su patrimonio, su tiempo y su imaginación a difundir un valor poco reconocido: la generosidad.

     El Centro Mexicano para la Filantropía, A.C.  como su nombre lo dice es una Asociación Civil, una institución privada, no lucrativa  sin ninguna filiación a partido, raza o religión. Su sede se encuentra en Ciudad de México y actualmente sirve a más de 3,500 instituciones, empresas y personas. Su misión es promover y articular la participación filantrópica, comprometida y socialmente responsable de los ciudadanos, organizaciones y empresas para alcanzar una sociedad más equitativa, solidaria y próspera. Con el fin de propiciar un México justo, incluyente y próspero, con ciudadanos activos y corresponsables de la construcción del bien público, que participan en organizaciones eficaces y transparentes en un marco de legalidad.

    En el 2001  Cemefi creó un  reconocimiento anual, cuyo logotipo seguramente habrán visto,  se otorga a las empresas y organizaciones establecidas en nuestro país que cumplen con una serie de criterios que abarcan, de forma general, la rentabilidad y sustentabilidad económica, social y ambiental. Las cuatro líneas estratégicas del distintivo son la ética y gobernabilidad empresarial, la calidad de vida en la empresa (dimensión social del trabajo), la vinculación y el compromiso con la comunidad y su desarrollo, el cuidado y preservación del ambiente; cada una de éstas se divide en 30 indicadores que la empresa tiene que cumplir para ser merecedor del distintivo.

Más allá de la obtención de este distintivo, el Cemefi considera que el cumplimiento de los principios de Empresa Socialmente Responsable ESR, contribuye a la “buena salud” de la organización y al fortalecimiento de su relación con la comunidad y sus consumidores; de forma puntual, se pueden mencionar entre los beneficios directos “una mayor simpatía de los consumidores, mayor lealtad de los colaboradores, mayor confianza de los inversionistas, facilidad en los procesos de toma de decisiones, optimización de recursos humanos y materiales y, en general, la instalación de procesos colectivos de mejora continua, para beneficio de la empresa y de toda la sociedad”.

Para 2019, 991 empresas cuentan con este distintivo, desde grandes empresas transnacionales hasta PYMES. De igual forma existen las que llevan solamente 1 año con dicho reconocimiento, hasta otras que tienen 19 años consecutivos recibiendo el distintivo, que es una forma de decirle a los empleados, clientes , autoridades y competencia que la empresa está tan comprometida con el desarrollo de la sociedad que hasta lo tiene engranado dentro de su cultura y planes de negocios.

     El compromiso avanzo, también en 2001, como uno de los resultados de la Conferencia de Responsabilidad Social de la Empresa realizada en la Ciudad de México en mayo del 2000, su comité organizador integrado por las principales organizaciones empresariales de México: el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Conferencia Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Impulsa, la Confederación de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), Aval y el Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi), crearon AliaRSE para promover estos principios que han  sido reconocidos y adoptados como propios por otras organizaciones regionales con las que el Cemefi ha establecido convenios para replicar su Programa de Responsabilidad Social de forma local —son los casos de UniRSE Jalisco, la Fundación Sinaloa Eco-Región y la Fundación del Empresariado.

   Así tenemos a las mujeres y hombres de negocios compartiendo su patrimonio, su energía y su tiempo  sin mayor interés que el bienestar de los grupos vulnerables. Usted puede entrar en su página e informarse las empresas que conforman este grupo.

     Para los interesados en el tema se encuentra publicado el libro “Filantropía y Acción Solidaria en la Historia de México” que gira  alrededor de tres periodos diferenciados: 1) la Colonia, hasta el establecimiento de la Beneficencia Pública, 2) el desarrollo de la filantropía decimonónica, principalmente durante el Porfiriato y 3) la evolución de la filantropía en el México moderno. Este apartado contribuye a la recuperación de la memoria del movimiento filantrópico y solidario en México para identificar personajes, instituciones y gestas que sembraron la semilla de esta labor social en el país. De venta en Cemefi.

emaldonadoballesteros@yahoo.es

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