Por Mario Díaz
En salud… la 4T favorece a la IP
-La “austeridad franciscana” está pulverizando el sistema de salud pública
-Escasez de medicamentos y especialistas favorece la medicina privada
-Sube de tono la polémica surgida por el IMSS y el IMSS Bienestar
H. Matamoros, Tamaulipas.- Tal parece que el programa en materia de salud pública del gobierno de la Cuarta Transformación no está arrojando los resultados esperados respecto al beneficio social y, en cambio, está favoreciendo a la atención médica privada.
El problema se agrava en los hospitales públicos ante la falta de especialistas quienes, ante el exceso de trabajo no remunerado, prefieren emigrar a hospitales privados o bien a sus propios consultorios, situación que, desgraciadamente, se presenta en los hospitales estatales, Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e ISSSTE.
La carencia de especialistas, medicamentos e insumos en los nosocomios públicos federales y estatales provocan que las personas que requieren de atención médica y suministro de medicinas acudan a las distintas farmacias, sobre todo, aquellas que ofrecen el servicio médico.
Sobran los casos documentados que, ante la falta de médicos especialistas en los hospitales públicos, los pacientes prefieren pernoctar en las afueras de los nosocomios para poder alcanzar una de las siete citas que ofrece el médico especialista en turno.
Ejemplos:
Pacientes del Instituto Mexicano del Seguro Social que son atendidos en el Centro Médico Siglo XXI en la capital del país-ante la falta de medicamentos-no recibieron sus quimioterapias ante la carencia de fluorouracilo y dispositivos utilizados para ese tratamiento.
La situación se agrava como consecuencia de la carencia de un elemento necesario para los pacientes con problemas cancerígenos: los parches con analgésico para mitigar el dolor.
Derivado del desabasto de medicamentos especiales para tratamientos oncológicos, los pacientes se ven en la necesidad de reprogramar sus citas, las cuales, se prolongan por varios meses con todo lo que ello significa.
El grave problema que enfrenta el país en lo que se refiere a salud pública se presenta en otras entidades federativas en condiciones similares como las que enfrenta el Centro Médico Siglo XXI.
La directora de Fundación Con Causa, ELENA GARCÍA, asegura que, en el Hospital del Niño Oaxaqueño, ahora del IMSS Bienestar, faltan medicamentos y quimioterapia por falta de recursos económicos federales para la adquisición respectiva.
Triste, pero a la vez valiente es la denuncia de la Asociación de Médicos del Hospital General de Sonora al precisar que “carecemos de materiales básicos para realizar cirugías, como insumos para máquinas de anestesia, suturas, drenajes, cerrados y prótesis vasculares, entre otros”.
En el estado de Aguascalientes la problemática se agudiza con los derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social quienes enfrentan la escasez de las necesarias medicinas para combatir la diabetes mellitus y las consecuencias de los males oncológicos.
Para mala fortuna de los pacientes del IMSS con problemas de insuficiencia renal la situación es caótica como consecuencia de la falta de medicamentos y, sobre todo, de médicos especialistas en urología y nefrología.
Otro caso que pone en entredicho al programa de salud del autodenominado segundo piso de la Cuarta Transformación se presenta en el estado de Oaxaca que gobierna SALOMÓN JARA CRUZ.
Los directivos del hospital civil Doctor Aurelio Valdivieso, ante la falta de insumos para laborar, carencia de diésel y gas L.P. decidieron suspender la realización de cirugías no urgentes, incluidas las obstétricas, de acuerdo a la medida adoptada por la directora del nosocomio, ROXANA RÍOS SÁNCHEZ.
La crisis, de acuerdo a la autoridad del citado centro hospitalario, provocó la racionalización de los alimentos del personal médico y de enfermería para priorizar las dietas de los pacientes hospitalizados.
Por otra parte, mientras el personal médico y los pacientes resienten los efectos de la “austeridad franciscana” del gobierno de la 4T, surge a la par una corriente de opinión que coloca en esquinas encontradas al tradicional sistema de salud que ofrece al IMSS y a la nueva versión IMSS Bienestar.
Por un lado, los empresarios cuyas aportaciones vía impuestos y cuotas obrero-patronales conforman un pilar importante para la seguridad social que proporciona el Instituto Mexicano del Seguro Social y, en sentido contrario, la política social de la Cuarta Transformación mediante el programa IMSS Bienestar que absorbe y se mantiene con los sistemas estatales de salud pública.
¿Cómo la ve?
DESDE EL BALCÓN:
I.-Eso de la crisis que enfrenta el sistema de salud pública nacional trae a colación las carencias que afronta el Hospital del IMSS en este puerto fronterizo bajo la dirección del doctor JOSÉ MANUEL SILVA.
El nosocomio carece de médicos cardiólogos, por lo que los derechohabientes deben se canalizados al IMSS de ciudad Reynosa, y solo tiene un nefrólogo para atender pacientes en el turno vespertino, incluyendo el área de urgencias.
Pero….mal, muy mal y, peor aún, con falsas promesas de asistencia y apoyo a quienes requieren de determinada atención médica.
Ni hablar.
II.-Respecto a la guerra comercial entre Estados Unidos y China que ha dado paso al nearshoring, por supuesto que le asiste la razón al Maestro RAÚL GÓMEZ ESPINOZA, Director General de la revista Proyección Económica 2020, cuando en su editorial de la edición Enero 2025, anota: “La ventaja mayor la tiene México por ofrecer mejores costos de operación, incentivos fiscales, nuevos parques industriales y un considerable etcétera, que nos convierten en la opción más viable (entre México y Canadá) para la relocalización de empresas, principalmente provenientes de China y Asia”.
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx