Por. – Benjamín Bojórquez Olea

El patrimonio político de Gerardo Vargas Landeros…

Gerardo Vargas Landeros se ha vuelto en lo que va de su administración cañera un político que cuya capacidad electoral y administrativa ha conseguido lo que pocos políticos Ahomenses, entre la paz y la gobernabilidad ha transitado bajo una coyuntura reflexiva, cosa nada común en la actualidad derivado a tanta polarización y fuego amigo por doquier. Al punto, término que consiste en ni cruda inglesa ni muy cocinada y se consigue a fuego medio alto. Así cocina su política, sin desesperarse.

Sus propuestas de gobierno han levantado ínfula por parte de sus detractores, ni que decir de sus contrincantes políticos en las pasadas elecciones, ya que después de mucho tiempo e insistir, finalmente el aventurero Gerardo Vargas Landeros había accedido a visitar zonas olvidadas por los gobiernos anteriores, y fue precisamente en esas colonias populares olvidadas por los políticos en donde inició su campaña y la evidente reelección, fue ahí, en donde prendió las alarmas de sus opositores. Quienes habían asistido y hablaban bien, pero siempre había un pero, quienes lo comentaban eran precisamente paladares humildes.

El día llegó, se alistó al encuentro con la expectativa a flor de piel por dejarse sorprender. “Nada nuevo bajo el sol”, dijo a sus amigos, esta carta lleva más de una década, quizá dos, en la ciudad Ahomense, donde el personal social venía del mismo origen y su iniciativa se limitaba a cambiar la apariencia y a veces el nombre.

El capital político de Gerardo Vargas Landeros se extiende de norte, centro y sur del estado, quizás el único alcalde de Sinaloa con varios tentáculos políticos en la geografía del estado, en donde se expande como una metáfora utilizada en la teoría política para conceptualizar la acumulación de recursos y poder construido a través de las relaciones, la confianza, la buena voluntad y la influencia entre los políticos y partidos, como los electores y el mismo comportamiento social.

Esta realidad le había parecido a Vargas Landeros uno de los tabúes de la política actual del municipio cañero, donde los “autores” están como ausentes. Y con ello, siempre lo pensó, se confirmaba la premisa en Ahome, el comensal va a “ver y dejarse ver”, como en los toros de los tiempos de María Félix.

El plato está servido. Y efectivamente “nada nuevo bajo el sol” en tan recomendado sitio; Gerardo Vargas Landeros, como la oferta política y social, como un “filete servido”, optó por condimentarlo y luego cocinarlo. Y será muy probablemente el alcalde morenista que más posibilidades tenga en la sucesión gubernamental de 2027. “Al tiempo”.

El capital político de Gerardo Vargas no ha caducado, se mantiene impoluto y en luna de miel, es decir, mantiene la agenda en el norte del estado después de haber ganado en las pasadas elecciones de 2024. Sin duda estará en la conversación.

GOTITAS DE AGUA:

El alcalde del trébol gana capital político al ganar elecciones ya sea jugándolas u operando para que otros levanten sus manos, aplicar políticas que cuentan con el apoyo público, y realizar favores a otros políticos.

No pasó mucho tiempo antes de que se involucrara profundamente en la política. Formó un equipo poderoso, viajó bajo cargos públicos para darse a conocer en todo el esqueleto sinaloense y se convirtió actualmente en el rostro político del norte del estado. “Si cierran la puerta, apaguen la luz”. “Nos vemos Mañana”…

Comentarios

Comentarios