Por Veneranda Mendoza.
Toluca, Méx.- Adeuda el partido político local Nueva Alianza Estado de México (NAEM) más de 6 millones de pesos, al momento de su extinción, pues del informe del interventor designado para inventariar sus bienes, Elías Velázquez Colín, se desprende un déficit por ese monto.
Pérdida de registro y déficit financiero
NAEM perdió el registro como partido político local, al no alcanzar, durante la elección de diputados locales del año pasado, 3 por ciento del porcentaje de votación requerido por ley para subsistir.
El balance revela que NAEM poseía, al 31 de octubre de 2024, recursos y bienes por 16 millones 074 mil 632 pesos, pero obligaciones por 22 millones 151 mil 199 pesos.
De los recursos que para esa fecha poseía, 5 millones 983 mil 576.67 pesos se encontraban en bancos, 4 millones 947 mil 018 en cuentas por cobrar y 5 millones 144 mil 036 pesos invertidos en propiedades y equipo.
Deudas y obligaciones pendientes
Por el contrario, entre sus pendientes se enlistaban seis millones eran deudas de carácter laboral, 5 millones 864 mil 825.27 pesos de tipo fiscal (deudas por pago de impuestos), un millón 262 mil 374 de tipo administrativo-electoral (con el IEEM), y 9 millones 24 mil pesos con acreedores.
A los adeudos anteriores, además deben agregarse pasivos contingentes por el orden de 120 mil pesos, de los que 60 mil corresponden a gastos por pago de honorarios de un auditor externo para dictaminar el informe ordinario 2024, y un monto similar para costear los gastos de publicación del aviso de liquidación en dos diarios de circulación estatal.
Boquete financiero dejando al Erario Público
De entrada, los pasivos se cubren con los recursos y bienes del partido, pero aún así NAEM desaparece dejando al erario público un boquete financiero superior a los 6 millones de pesos.
El presupuesto 2025 aún considera recursos por 48 millones 129 mil 230 pesos para NAEM, de manera que con ese monto podrían solventarse los pasivos y, aún así, se tendría un remanente de alrededor de 40 millones que podría reencaminarse con otros fines, como costear parte de los comicios de jueces y magistrados locales.
