Primero Editores / Ingrid Ahumada M.
Toluca, México.- El robo de motocicletas con o sin violencia se podría considerar como delito grave y podría alcanzar una pena de hasta 25 años de prisión, esto debido a que las comisiones legislativas de Procuración y Administración de Justicia, aprobaron por unanimidad el dictamen para reformar el Código Penal estatal.
La iniciativa fue presentada por la diputada Rosa María Zetina González, la misma propone reformar los artículos 290 y 292 del Código Penal del Estado de México, para incrementar la penalidad del delito de robo de motocicleta, ya que actualmente este medio de transporte es el cuarto más robado.
Zetina González precisó que según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional, el Estado de México ocupa el primer lugar en delito de robo a motocicletas, en el año 2016 se cometieron más de 4 mil delitos en esta materia; mientras que en el 2017 hubo registro de más de 5 mil y en 2018 se tiene registro de más de 7 mil robos, lo que -dijo- refleja un crecimiento importante de este delito.
Asimismo, indicó que según estadísticas de usos de vehículos automotores del INEGI, en la última década el parque vehicular aumentó en un 400 por ciento, siendo la moto Italika la más robada en México.
Ante lo anterior, la diputada Violeta Nova Gómez, dijo que debido al auge en la compra de motocicletas también ha aumentado el robo de estos vehículos, que -denunció- también están vinculados a ilícitos.
“La reforma va a poder incidir en otros delitos que se cometen a bordo de estas unidades y dificulta su detención porque los roban y los utilizan sin placas de circulación y no permiten dar con el propietario”, argumentó.
Ante lo anterior, la iniciativa también establece que quienes compren o vendan un vehículo automotor, deberán obtener la constancia o certificación electrónica de que el vehículo o motocicleta no aparece en la base de datos de autos robados del Registro Público Vehicular.
El dictamen deberá ser aprobado por el pleno de la Legislatura local, el mismo considera imponer de ocho a 20 años de prisión y de uno a tres veces el valor del vehículo robado, tratándose de una motocicleta de uso particular, además de lo anterior se aumentará la pena de prisión hasta por cinco años más.
