Zuleyka Franco
Para muchos la Grafología es una ciencia, para otros una pseudociencia y para muchos más, charlatanería… Pero la realidad es que la Grafología ha estado con nosotros desde hace más de 6 mil años, ya que no sólo la escritura tiene un significado, sino también los dibujos en los orígenes de la humanidad y los símbolos, ya que al final y en resumen, todos los mencionados son grafos.
En ésta ocasión hablaremos de La Firma como nuestro Yo Íntimo, Social y Profesional, ya que al ser un trazo libre e inconsciente, es quien nos habla de nuestra verdadera actitud con la familia, con nuestros amigos, con nuestra profesión o trabajo, de nuestras actitudes ante la vida y de nuestros deseos más íntimos. La Firma es el sello personal que nos permite conocer rasgos des escribiente y la síntesis de la personalidad, como una biografía abreviada de un individuo.
La Firma también habla de carácter, complejos, defectos, virtudes, de los sellos de vanidad y orgullo, ambiciones, sentimientos de inferioridad o de superioridad, aptitudes de adaptación e integración o su tendencia de sociabilidad o aislamiento social.
Así diremos, que las personas que en su firma se destaca su nombre sobre los apellidos, habla de preponderancia de la vida íntima y personal sobre la social; por lo contrario, quien en su firma destacan sus apellidos sobre el nombre, hablaremos de una persona que se siente más satisfecho e importante en su rol social o profesional que en su vida personal.
Si en la firma sobresalen los trazos curvos hablamos de amabilidad, cordialidad y adaptación. Si los trazos angulosos predominan, hablaremos de una necesidad de reafirmar la personalidad, de firmeza y energía acentuada, independencia, individualidad, incapacidad de adaptación, inflexibilidad, incapacidad para resolver conflictos íntimos y que en la intimidad puede mostrarse duro, intransigente, impaciente, áspero y frio. Posiblemente una persona agresiva, ya sea con sus pensamientos, actitudes o palabras.
Cuando la firma es envuelta con uno o varios círculos, habla de una necesidad de sentir protección o de un miedo a ser atacado, posibles actitudes narcisistas, egoísmo, egocentrismo, astucia para defenderse. También habla de prudencia, desconfianza, temor, inhibición y posible incomodidad o aislamiento.
Un trazo muy común en las firmas es cuando la zona media de las firmas esta rayada o tachada; esto nos habla de un deseo inconsciente del escribiente por eliminarse, tendencia a la autodestrucción y al autocastigo. Complejo de culpabilidad, tendencia a la dramatización excesiva de sus faltas o de sus minusvalías. La autodestrucción son más marcados cuando los trazos son acerados o angulosos y cuando se tacha de derecha a izquierda.
Cuando la Firma tiene un punto al finalizar la misma, habla de personas con tendencia a repasar lo ya hecho, de carácter determinante, de reflexión, prudencia, ejecución exacta de sus tareas, posible desconfianza; pero si el punto está muy abajo, es posible pesimismo. Cuando son varios puntos después de la firma, habla de sentimientos de culpabilidad o sobresalto, preocupaciones íntimas o de masonería si forman el triángulo conocido.
La firma es un sinfín de características íntimas, sociales, familiares y profesionales con las que podemos definir la personalidad y las generalidades más importantes de una persona. Es súper importante contar con una buena orientación si tu intención es que tu firma se oriente más a tu profesión, a modificar actitudes o a lograr objetivos, así que te invito a conocer un poco más acerca de la Grafología y de cómo puedes utilizarla a favor de tus relaciones personales, familiares y sociales.