Primero Editores / Ingrid Ahumada M.
Toluca, México.- El domingo de ramos representó más que una bendición fuertes pérdidas para poco más de 3 mil artesanos dedicados a producir palmas, pues debido a la contingencia sanitaria derivada por el Covid-19 las ventas fueron mínimas, al punto que nisiquiera podrían recuperar su inversión.
En entrevista, Juan Izquierdo, artesano originario de San Cristóbal Huichochitlán en Toluca, explicó que la razón de las bajas ventas es el cierre de las iglesias y la cancelación de eventos en las mismas, incluidas las misas que ahora realizaron de manera virtual.
Indicó que algunos artesanos se preparan para esta temporada desde el mes de enero, quienes en su mayoría realizan el producto en masa y lo venden a revendedores que se van incluso a otras entidades.
“Es una cadenita de comercio y la verdad si está afectando mucho, no hay ventas no hay nada”, insistió.
Este año, los artesanos adquirieron el atado de palma alta y blanca entre los 230 y los 300 pesos, palma que utilizan para realizar ramos y cruces que normalmente se bendicen en misa.
“El impacto económico es preocupante, porque de alguna manera los artesanos que aprovechan esto de tejer y vender son personas necesitadas y con esto generan más ingresos, es alarmante la situación, los artesanos finalmente se dedican a las ventas de temporada, después vienen los artículos patrios y vamos a ver cómo va con eso”, comentó.
