Toluca, Méx.- Mejorar la salud intestinal mediante la optimización de probióticos es el objetivo del estudio liderado por Andrea Yazmín Guadarrama Lezama, investigadora de la Facultad de Química de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx). Su investigación ha identificado al alginato de sodio, un compuesto derivado de algas marinas, como uno de los materiales más eficaces para proteger al Lactobacillus acidophilus, bacteria esencial para el sistema digestivo.

¿Por qué son importantes los Lactobacillus acidophilus?

Los Lactobacillus acidophilus son microorganismos que desempeñan un papel crucial en el sistema digestivo, ayudando a descomponer alimentos, absorber nutrientes y fortalecer el sistema inmunológico. Además, su presencia es fundamental para combatir bacterias dañinas que pueden causar afecciones como diarrea o el síndrome del intestino irritable.

Sin embargo, estos microorganismos enfrentan obstáculos en su recorrido hacia el intestino, como el ácido estomacal y las sales biliares. Por ello, el estudio se enfocó en identificar materiales capaces de encapsular y proteger a estas bacterias durante su tránsito digestivo.

El alginato de sodio: el aliado natural para el intestino

Después de analizar diversos materiales, el equipo de Guadarrama Lezama descubrió que el alginato de sodio es uno de los más efectivos. Este compuesto, extraído de algas marinas, es ampliamente utilizado en la industria alimentaria como espesante en productos como salsas y helados. Su capacidad para formar una barrera protectora asegura que el Lactobacillus acidophilus llegue intacto al intestino, potenciando así sus beneficios.

“Los probióticos enfrentan desafíos como cambios de pH, enzimas digestivas y sales biliares en el estómago. Por eso, se están desarrollando tecnologías para mejorar su estabilidad. El alginato de sodio es un material que cumple con estas necesidades y es seguro, además de ser común en la industria alimentaria”, explicó la investigadora.

Colaboración internacional y reconocimiento científico

El estudio, titulado “Efecto de los métodos y materiales de encapsulación sobre la supervivencia y viabilidad de Lactobacillus acidophilus: una revisión”, fue realizado en colaboración con expertos nacionales e internacionales. Participaron Ana Verónica Altamirano Ríos y Juan Orozco Villafuerte, de la UAEMéx; Izlia J. Arroyo Maya, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Cuajimalpa, y Alan Javier Hernández Álvarez, de la Universidad de Leeds, Inglaterra.

Los resultados fueron publicados en el International Journal of Food Science and Technology en abril de 2022 y, actualmente, se encuentran en revisión dos artículos más que derivaron del estudio.

La investigadora subrayó que esta línea de trabajo permitirá, en el futuro, mejorar la calidad de productos probióticos comerciales, garantizando una mayor cantidad de microorganismos activos en el intestino. Finalmente, destacó la importancia de fomentar la participación de mujeres en la ciencia, pues el conocimiento, aseguró, no tiene género y es una herramienta fundamental para el desarrollo de la sociedad.

Comentarios

Comentarios