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Toluca, México.- En caso de que el 50 por ciento de los negocios del sector restaurantero que están en riesgo de cerrar no vuelvan a operar después de la contingencia sanitaria por Covid-19, 170 mil personas podrían perder el empleo, indicó el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) Valle de Toluca, Mauricio Massud Martínez.
En entrevista explicó que, en la entidad hay 70 mil unidades de negocio que albergan 340 mil empleos y al menos la mitad está en riesgo de quebrar debido a que el último mes han perdido cerca de 4 mil 500 millones de pesos ante las bajas ventas y al menos la mitad representa un mes de nómina que los empresarios no pueden cubrir.
Explicó que la mayoría son pequeñas y micro empresas, cuyas ventas disminuyeron hasta 90 por ciento debido a que solo 10 por ciento de los negocios tienen la opción de venta de comida para llevar o a domicilio.
“Estamos haciendo un gran esfuerzo por mantener nuestras plantillas de personal completas y pagandoles, sin embargo, el debacle de ventas se ha convertido en un tema difícil, sobre todo la liquidez para pagar a nuestros empleados”.
Recalcó que las cifras son alarmantes debido a que son el segundo empleador a nivel nacional después de la federación y contribuyen anualmente con más de 50 mil millones de pesos al Producto Interno Bruto (PIB) de la entidad.
“Lo que caracteriza esta situación es la incertidumbre, no tenemos la seguridad de que el 30 de abril se puedan levantar las cortinas para poder operar, dudo que pase eso y quizá tarde otras semanas para que se regularice el tema y proyectamos que la recuperación del sector será demasiado lenta, le damos tres o seis meses, pues las personas estarán sin recurso y habrá poca confianza hacia el consumo”.
