Primeros Editores / Ingrid Ahumada M.
Tenancingo, México.- Todos los días riegan y cuidan a quienes adornan y en algunos casos perfuman los hogares de mexicanos, quienes resultan ser el detalle más solicitado para fechas especiales como el próximo 14 de febrero, las rosas y gerberas requieren de un trato cariñoso y constante para que crezcan sanas y sean una muestra de cariño entre los enamorados, al menos, así lo explicó el floricultor Martín Ramírez Franco.
En su invernadero en Tenancingo, mientras limpiaba las rosas que cortarán los primero días de esta semana, explicó que aunque trabajan, cuidan y cortan este tipo de flores durante todo el año, hay fechas específicas en donde la venta incrementa, sobre todo el 14 de febrero, el 10 de mayo y el 12 de diciembre.
Indicó que para esta temporada cortan a la semana alrededor de 50 paquetes con dos docenas de rosa cada uno, es decir, más de mil rosas salen de su invernadero con destinos diferentes al interior de la República.
“Por el día del amor se regala más la rosa y es la que más solicitan en color blanco y rojo, los intermediarios nos piden entre 200 y 300 paquetes, mientras que en temporadas normales nos piden desde 50 o hasta 100 paquetes, es decir incrementa la venta hasta en un 50 por ciento”, comentó al tiempo que dijo que por la temporada, prevén la venta de cada paquete de rosa entre 180 y 200 pesos, aunque en las florerías podrían incluso duplicar el precio.
Contó que en su invernadero se han dedicado por más de 15 años a trabajar las rosas y gerberas, esta última también solicitada para la fecha, aunque ambas requieren de cuidados constantes, pues los cambios de temperatura pueden quemar la flor o no permitir su crecimiento para la venta a quienes se dedican a hacer grandes arreglos florales.
“Ahorita las heladas no nos han afectado tanto, antes se nos quemaba la flor y perdíamos hasta el 50 por ciento, por eso las cuidamos tanto, del diario las regamos y las limpiamos, además debemos medir constantemente la temperatura del lugar para que crezcan bien”, explicó.
Destacó que los floricultores de Tenancingo son los productores de flor más importantes en el país, quienes en su mayoría se dedican por herencia a esta actividad, pues sus antecesores lo hacían y crecieron entre flores, como en su caso.
Innovan en la producción
Como una forma de venta y para atraer a nuevos clientes, su familia innovó en la presentación del color de las rosas, ahora las venden “bicolor”, presentación que logran a partir de la pigmentación de pintura vegetal y la flor natural.
Para lograr que las rosas absorban de dos a tres colores, parten el talle en dos o tres y en cada uno colocan una pipeta que contiene un tono diferente, color que absorbe la flor al cabo de un día o dos.
Mientras que en el caso de las rosas que se pigmentan de un solo color, basta con verter un poco de la pintura en agua y la flor va absorbiendo el tono.
Esta presentación la elaboran sobre pedido y la venden hasta en 250 la docena, pues el proceso conlleva más cuidados para evitar que se el pétalo se maltrate y no luzca natural.