Primero Editores / Ingrid Ahumada M.

Toluca, México.- Entre los métodos que utilizan algunos pseudo prestadores de servicios de salud para realizar un aborto se encuentra el raspado de la vagina con cucharas oxidadas, popotes que introducen en las vaginas para absorber el feto, además de que les dan pastillas para que expulsen el producto, explicó Esperanza Arias Velázquez, líder Estatal de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos.

En entrevista para Primero Editores, indicó que entre las afectaciones que tienen las mujeres que se practican este tipo de abortos ilegales e inseguros se encuentran hemorragias, infecciones, baja de glóbulos rojos con lo que les da anemia y dolores insoportables, ante esto dijo que “muchas son salvadas pero a otras se les tiene que quitar la matriz lamentablemente para salvar su vida”.

Comentó que la Red ha brindado apoyo por más de diez años a mujeres mexiquenses que han solicitado la interrupción legal del embarazo y precisó que del 2017 a la fecha han registrado más de 200 casos, de ellos el 90 por ciento fueron de embarazos de mujeres de entre 10 y 20 años de edad, cuyo motivo fue la violación.

Los 200 casos -dijo- se interrumpieron basándose en las causales del artículo 251 del código de procedimientos penales del Estado de México aplicando la norma 046 en las instituciones de salud, que se debe aplicar cuando una mujer está embarazada como producto de una violación y debe ser atendida de manera urgente en cualquier centro de salud, aunque aseguró que en las instituciones no la están aplicando, más que en el hospital Las Américas y el Mónica Pretelini.

“Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir, eso es lo que tiene que hacer el Estado mexicano, poner en práctica o fortalecer políticas y programas para evitar la deserción escolar de las mujeres embarazadas y las madres jóvenes, dar prioridad a prevenir el embarazo en la adolescencia y eliminar el aborto inseguro mediante la educación integral para la sexualidad”, precisó.

Sin embargo, en contraste y en el mismo contexto, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en los últimos tres años, en el Estado de México se han realizado 65 interrupciones del embarazo, debido principalmente a que se encontraba en riesgo la vida de la madre, además de que en otros casos -sin precisar cuántos-, la gestación fue resultado de violencia sexual.

La dependencia señaló que los casos en que la interrupción del embarazo fue obligada después de un ataque sexual, se realizaron en apego a la Norma Oficial Mexicana 046-SSA2-2005 “Violencia familiar, sexual y contra las mujeres. Criterios para la prevención y atención”, la cual establece que en caso de embarazo por violación, las instituciones de salud deben prestar el servicio de interrupción voluntaria del mismo, tal como lo mencionó la activista.

Mexiquenses abortan en CDMX

En este punto es preciso indicar que, de acuerdo con el Sistema de Información de la implementación de la Interrupción Legal del Embarazo en la Ciudad de México (ILE), entre 2007 y 2019 en la Ciudad de México se atendieron a 53 mil 904 usuarias provenientes del Estado de México, con lo cual ocuparon el segundo lugar a nivel nacional. Además, indican que en la entidad se han presentado 65 mil 996 casos de complicaciones por abortos ilegales que han sido atendidas en el sistema de salud.

Esperanza Arias Velázquez, comentó que hasta el momento en el Estado de México ninguna mujer que haya practicado el aborto ha sido procesada, sin embargo, precisó que existen 38 casos que están en proceso legal, es decir, están en análisis para que se proceda a un encarcelamiento, aunque de estos hay tres en amparo a quienes ya se les dio una sentencia que cumplen a partir de trabajo social.

En tanto, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública en delitos del fuero común del 2018, precisa que en las 32 entidades de enero a diciembre se iniciaron 575 procesos de investigación por el delito de aborto en todo el país y el Estado de México ocupó el primer lugar nacional en incidencia con 79 casos presentados ante el ministerio público.

Es importante indicar que en el Estado de México el artículo 248 del Código Penal estatal establece penas de tres a ocho años de prisión y de 50 a 400 días multa, a quien cometa el delito de aborto si se obra sin consentimiento de la mujer embarazada.

Avances Legislativos

Durante su comparecencia ante el pleno de la Legislatura local, el secretario de Salud Gabriel O’shea, consideró que en la entidad el aborto no debería estar penalizado, aunque aseguró que el gobierno estatal será respetuoso de lo que decidan la Cámara de Diputados.  

“Si me preguntan la posición, yo les debo decir que de manera particular e independientemente de las causas del aborto, yo creo que el acto en sí, el acto del aborto no debiera de estar penalizado, eso es cierto, no debería estar penalizado”, expuso ante los legisladores locales.

En tanto, la legisladora del PRD Araceli Casasola, mencionó que de más de 214 mil interrupciones de embarazo en la Ciudad de México, poco más de 61 mil provienen de otras entidades, en su mayoría del Estado de México, de ahí la importancia de que las iniciativas pendientes se retomen.

Aseveró que le tomarán la palabra a las entidades que en estos meses se han sumado a la despenalización, motivo por el que en la Legislatura mexiquense buscarán se retome.

“Le tomamos la palabra a quienes desean impulsar esta reforma a nivel nacional, con esta reforma estamos seguras que ninguna vida se va a perder, ya que hasta el momento muchas mujeres pierden la vida al hacerlo de manera clandestina”.

“Es una necesidad garantizar el acceso a los servicios de salud que garanticen una interrupción del embarazo legal y segura”, agregó.

De la misma forma aseguró que el PRD estará impulsando en la legislatura local este tema, pues es una lucha que han venido trabajando desde hace varios años, también, reconoció que lamentablemente se han encontrado resistencias, por parte de grupos parlamentarios conservadores, que sin lugar a dudas han influido en la negativa hacia la aprobación de una reforma de estas dimensiones.

En tanto, la diputada de Morena Nancy Nápoles Pacheco advirtió que independientemente de las ideologías, legalizar el aborto no implica que sea obligatorio hacerlo, ni que se recurra a éste como un método anticonceptivo, pero penalizarlo criminaliza a todas las mujeres y el aborto inseguro conlleva el detrimento de salud de las mujeres.

Embarazo adolescente

Sin embargo, el aborto no es la única situación que preocupaba a las autoridades, ya que el embarazo adolescente también registraba un aumento, aunque según datos de la Secretaría de Salud, en los últimos años se rompió la tendencia a la alza, ya que entre 2017 y 2018, los casos de embarazo adolescente han disminuido en cerca del 10 por ciento en la entidad, al pasar de 50 mil 263 a 45 mil 152.

Indican que la mayoría de estas gestaciones -en promedio-, se presentan en jóvenes de 19 años de edad, en tanto que los municipios que registran más casos son Ecatepec, Toluca, Nezahualcóyotl y Chalco.

El Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) señala que, en 130 Módulos de Atención del Adolescente se brindan anualmente más de 70 mil consejerías en las que se entregan métodos anticonceptivos para evitar gestaciones no planificadas que resultan en problemas como abandono escolar, matrimonio forzado y temprano, conflictos familiares y carencia de ingresos económicos. 

En estas orientaciones médicas explican a los menores de edad que el embarazo temprano implica riesgos a la salud como anemia, amenaza de aborto, hipertensión gestacional, infecciones y en los bebés, enfermedades por prematurez.

A pesar de lo anterior, la líder Estatal de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos, aseguró que los embarazos infantiles y adolescentes son un dilema y falta de atención por parte de las autoridades, pues en los últimos años -dijo- han aumentado hasta en un 50 por ciento y la mayoría son por una violación.

Actualmente precisó que la organización apoya a menores embarazadas y recordó que tuvieron el caso de una pequeña de 9 años a la que se le practicó un aborto por producto de una violación.

“Niñas de 10 o 12 años tienen embarazos que son parte de la violencia que están viviendo dentro de la familia. (…) Hay muchas niñas que desde los 9 años están empezando con períodos menstruales y es muy importante que tengan información básica desde su salud, desde su cuidado, desde que no tengan una infección y ni siquiera de transmisión sexual, sino por mal uso de un jabón o de su misma ropa interior”, agregó. 

En tanto, ambos temas siguen en la congeladora en la Legislatura local, en espera de diálogo o realización de foros que les permitan analizar a los diputados mexiquenses la decisión que tomarán, pues entre ellos aseguran que la razón por las que no proceden de comisiones es que no llegan a un consenso entre las bancadas.

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